Su gestión de la crisis del calendario escolar, sus declaraciones incendiarias, su falta de respeto al personal docente de Cantabria y su manifiesta incapacidad para el dialogo lo inhabilitan para seguir ni un minuto más en el cargo.
Resulta especialmente irritante y totalmente inaceptable que sea el propio Consejero de Educación el que critique abiertamente la profesionalidad de los docentes en su conjunto, lanzando insidias y calumnias en los medios de comunicación. ¿De qué nos extrañamos luego? Los docentes de Cantabria no nos merecemos tener a un irresponsable e incompetente al frente de la Consejería de Educación.
Además, parece que nuestros responsables educativos del PSC-PSOE han optado por recuperar tics autoritarios más propios de épocas pasadas.
No es un afirmación gratuita cuando se ha publicado un decreto de Servicios Mínimos que supera los establecidos por la Comunidad de Madrid (hasta ahora los más exigentes), en lugar de aclarar contundentemente que el profesorado que no ejerce su derecho a huelga está trabajando y debe colaborar en la atención al alumnado que acude a los colegios en los días de convocatorias. La excusa de “no atiendo a los alumnos de P.. porque P.. está en huelga “ no es válida. Quién acude al centro de trabajo durante la jornada de huelga va a trabajar, y la forma de solidarizarse con los compañeros y compañeras que ejercen su derecho es uniéndose al paro. El derecho a no hacer huelga se respeta, pero no seamos hipócritas.
Por si este decreto fuera poco, las instrucciones emitidas por la Consejería para controlar al profesorado huelguista (huelga que se ha hecho para reivindicar la dignidad del profesorado y una concepción de la enseñanza que considerábamos consolidada) rozan la ilegalidad (esa ilegalidad que tanto miedo tienen a cometer pero de la que nuestro Consejero acusa a sus antecesores en el cargo quedándose tan tranquilo, por cierto) cuando exigen a los equipos directivos que el profesorado que ha participado en la jornada de paro firme las hojas el mismo día de la huelga.
¿No se fía el equipo dirigente de la Consejería de los equipos directivos de los colegios de Cantabria?. Siempre ha sido suficiente la comunicación de la dirección mediante el parte de incidencias facilitado a través de Educantabria, con la posterior firma de los participantes cuando reciben la comunicación de deducción de haberes correspondiente.
Al exigir a los centros que se enviaran las hojas de firmas durante la misma mañana del viernes, no han debido de tener en cuenta sus propias instrucciones de inicio de curso, las cuales, en el apartado de horario del profesorado remiten al artículo 27, apdo. 3 de la Orden EDU/65/2010, de 12 de agosto, que aprueba las instrucciones que regulan la organización y funcionamiento de las escuelas infantiles, de los colegios de educación primaria y de los colegios de educación infantil y primaria de la Comunidad Autónoma de Cantabria.
Este artículo dice que: “Los profesores permanecerán en el centro treinta horas semanales, que se reflejarán en el horario individual de cada profesor, de las cuales veinticinco serán lectivas y cinco complementarias de obligada permanencia en el centro. El resto, hasta las treinta y siete horas y media semanales, serán dedicadas a la preparación de las actividades docentes, la formación permanente o cualquier otra actividad pedagógica complementaria.”
Son muchos los colegios cántabros que distribuyen esas cinco horas de formas diversas, encaminadas todas ellas a una mejor organización del centro facilitando la imprescindible coordinación y cooperación entre los equipos de ciclo y todos los miembros del Claustro que permite desarrollar los programas y proyectos que cada centro desarrolla. Así hay centros que concentran esas horas en dos o tres tardes, otros las incluyen antes del inicio de las sesiones lectivas con el alumnado, otros al finalizar estas sesiones…
De nuevo parece que los responsables educativos no conocen como funcionan los colegios ni, lo que es más grave, cual es el trabajo de los maestros y maestras. Pero también parecen desconocer sus propias instrucciones de inicio de curso, en las que seguimos leyendo sobre los horarios del profesorado:
“G) REMISIÓN DE HORARIOS INDIVIDUALES Y OTRA DOCUMENTACIÓN RELEVANTE 1. Los directores o directoras de los centros deberán remitir los horarios individuales del profesorado al Servicio de Inspección de Educación, lo que se realizará mediante la grabación de los mismos a través de la plataforma Yedra antes del 15 de octubre. Una copia firmada y sellada del documento “horario individual del profesorado” será entregada a los interesados y otra quedará depositada en el centro para su custodia. El mismo procedimiento deberá seguirse siempre que se produzca alguna modificación en dicho horario a lo largo del curso.”
Quizás, con los nervios por la convocatoria de la huelga, que ellos podían haber evitado, o con los problemas para sustituir a los más de 200 maestros que faltan en los colegios y que no se incorporarán hasta bien entrada la próxima semana, en el mejor de los casos (situación que se repetirá lamentablemente en los institutos de nuestra región) o la cascada de peticiones de dimisión del consejero (a las que se ha unido incluso la propia FAPA además de todos los grupos políticos y, por supuesto, la Junta de Personal Docente No Universitario) no han tenido tiempo de leer su propio documento e ignoran que los horarios individuales no están confeccionados aún definitivamente.
Deseamos que la cordura vuelva a nuestros administradores educativos y que no adopten medidas de las que puedan tener que responder no ya ante la sociedad y el profesorado, sino incluso ante la administración de Justicia.
