ANPE Cantabria quiere manifestar su más enérgica protesta por la decisión de la Consejería de Educación de no sustituir las bajas o ausencias del profesorado cuya duración sea de cinco días o menos. Según hemos podido conocer, esta medida se ha impuesto de facto, sin comunicación previa a las organizaciones sindicales ni a la comunidad educativa, y está provocando un perjuicio real y continuado en la atención que recibe el alumnado y en las condiciones de trabajo del resto del profesorado, que debe asumir las suplencias improvisadas.
Desde ANPE Cantabria consideramos que:
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La citada decisión no encuentra respaldo en la normativa reguladora de la provisión de empleo docente en régimen de interinidad, que describe los tipos de nombramiento y las modalidades de sustitución y cobertura de vacantes y ausencias. La Orden reguladora de interinos recoge, entre otras figuras, el nombramiento por sustitución y el de cobertura de vacantes sobrevenidas, con procedimientos y criterios para su ejecución.
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Tampoco se ampara en el procedimiento de llamamientos para cubrir vacantes y sustituciones establecido por la Consejería, cuyo régimen de llamamientos semanales regula la forma y condiciones en que deben atenderse las necesidades de personal docente.
La aplicación práctica de no cubrir bajas cortas conlleva consecuencias negativas y evitables: aumento de ratios efectivos en aulas concretas, incremento de la carga de trabajo del profesorado que debe asumir sustituciones sin planificación, pérdida de continuidad educativa para el alumnado (especialmente el más vulnerable) y deterioro del servicio público educativo.
Por todo ello ANPE Cantabria EXIGE a la Consejería de Educación:
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Reversión inmediata de la práctica de no sustituir las ausencias del profesorado de hasta cinco días de duración y restauración del criterio de cobertura diaria de bajas, tal y como se hizo de forma eficaz durante el periodo de pandemia.
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Que, en caso de no poder garantizar sustituciones día a día por motivos puntuales de gestión, se imponga con carácter prioritario la adjudicación de todas las sustituciones ofertadas en los días de llamamiento, independientemente de la duración prevista de la ausencia, hasta que exista una solución estructural.
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Comunicación inmediata y por escrito a las organizaciones sindicales sobre cualquier cambio en la política de sustituciones, con una convocatoria urgente de mesa sectorial para abordar el problema y acordar medidas (procedimentales y presupuestarias) que garanticen la atención educativa.
ANPE Cantabria recuerda que la cobertura de bajas no es un gasto prescindible: es una necesidad básica del servicio público educativo. La excusa de “ahorro” o de reorganización administrativa no puede pagarse con la calidad educativa ni con la salud laboral del profesorado.
Si la Consejería no atiende estas demandas en el plazo razonable, ANPE Cantabria anunciará las acciones que considere oportunas (entre ellas la elevación de reclamaciones formales ante las instancias competentes y la movilización sindical) para defender los derechos del profesorado y la atención adecuada del alumnado.
