ANPE Cantabria considera inadmisibles e insultantes las declaraciones proferidas por la Consejera de Educación, dudando de la profesionalidad de los docentes de la Enseñanza Pública de Cantabria. La Consejera de Educación ha afirmado que "nadie cuestionó el cierre de colegios en marzo", pretendiendo insinuar, quizá, que los docentes nos "íbamos de vacaciones"… tal vez porque así lo hizo ella…
En opinión de ANPE Cantabria, las declaraciones de la Consejera no son un simple despiste: corresponden a una estrategia calculada, que pretende trasladar a la opinión pública la idea de que el trabajo docente es exclusivamente el que se hace en clase, y que los periodos no lectivos son “vacaciones”; nada más indignante y alejado de la realidad. El hecho de querer “cambiar” una semana de descanso pedagógico, por otro momento del curso, muestra a las claras el concepto que la Consejera tiene de la educación: lo importante son los días lectivos, nada más.
El comportamiento de esta Consejera de Educación es totalmente indigno del cargo que ostenta, y no debe permanecer en su puesto ni un minuto más. Desde que inició la legislatura, no ha hecho más que mentir, manipular y hacer una continua dejación de funciones, cargando el peso de la gestión de la pandemia en los equipos directivos y en los docentes.
Estas declaraciones son la gota que colma el vaso de la paciencia de los docentes de Cantabria, que no pueden aguantar ni una sola humillación más. La Consejera de Educación pretende culpar a los docentes de la ineficacia de su gestión, y pretende comparar dos situaciones totalmente diferentes: el confinamiento general de marzo y la suspensión del periodo no lectivo de esta semana.
ANPE Cantabria se permite recordar a la Consejera algunas de las gestiones chapuceras, del largo historial que tiene en su haber:
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Despido, sin negociación, de 60 docentes durante el confinamiento de marzo, con amenazas de despedir a 150 más.
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Incumplimiento de sus obligaciones, dejando a los centros la responsabilidad de gestionar la educación online sin medios ni recursos suficientes.
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El teletrabajo de alumnado y docentes, sigue sin regularse. Esto no afecta solamente a un posible confinamiento general, sino al alumnado, aulas y centros en cuarentena. ANPE lleva pidiendo la regulación del teletrabajo desde el inicio de la pandemia, sin respuesta alguna…
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Dejación de funciones y falta absoluta de proyecto educativo y de liderazgo durante la preparación de la vuelta a las aulas.
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Su falta de previsión, ha dejado sin vacaciones a los equipos directivos y a muchos docentes, para preparar los planes de contingencia de cada centro... y no se han quejado.
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Toma de decisiones absurdas y contradictorias durante el confinamiento (vuelta a las aulas, afortunadamente frustrada, el 25 de mayo).
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No se han empleado en su totalidad los “fondos Covid”, destinados a preparar los centros educativos y dotarles de profesorado, ante la pandemia.
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Tampoco da explicaciones de qué cantidades de los “fondos Covid”, y en qué conceptos, se han asignado a los centros privados.
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Ha mantenido estrictamente las mismas ratios (número de alumnos por grupo) que existían antes de la pandemia.
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Modificación unilateral y sin negociación, de órdenes que afectan al profesorado interino.
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Modificación unilateral y sin negociación de un calendario escolar que había sido pactado con la Junta de Personal Docente antes del confinamiento.
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Los trabajadores especialmente sensibles (con enfermedades que pueden causarles gravísimas consecuencias en caso de contraer la Covid-19) han sido absolutamente desprotegidos, sin proporcionarles ninguna solución: a trabajar como si estuvieran sanos…
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Los coordinadores Covid de los centros educativos se ven absolutamente desbordados de trabajo, debiendo emplear horas libres, fines de semana, noches,… para poder sacarlo adelante. La consejera no hace nada...
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A todas estas decisiones, se suma la última improvisación marca de la casa: suspensión, sin negociación, del periodo no lectivo de la primera semana de noviembre, solo dos días antes del comienzo del mismo. La Consejera ha alegado motivos sanitarios, pero sin embargo, estos nunca han sido mostrados, argumentados ni justificados. Es más, recientemente hemos sabido que el informe de sanidad esgrimido por la Consejera para tomar esta absurda decisión, no recomienda tal medida. ANPE Cantabria reta a la Consejera a que haga públicos los informes sanitarios que apoyan esta medida.
La Consejera de Educación tiene en su currículum ser la única que ha puesto en su contra a toda la comunidad educativa: alumnado, docentes, equipos directivos, familias... Con decisiones autoritarias, unilaterales, caprichosas y sin sentido ha provocado un malestar jamás visto en nuestra comunidad autónoma. Es la única responsable de educación que ha recibido una petición de dimisión por parte del Comité de Directores de Secundaria, que la acusan nada más y nada menos, de mentir y manipular. Ahí queda eso...
A día de hoy, con la pandemia en plena efervescencia, la Consejería de Educación todavía no ha desarrollado los planes para gestionar los más que posibles escenarios 2 y 3, que anunciaron en el protocolo de organización educativa frente a la pandemia. Como siempre, y para no perder la costumbre, ha dejado esa responsabilidad en manos de los equipos directivos y del resto de docentes.
De igual manera, en lugar de facilitar ayuda a los centros educativos para la aplicación de los planes de contingencia para la vuelta a las aulas, ha dejado vendidos a los equipos directivos y a los docentes. Los docentes no somos profesionales de la sanidad, y por lo tanto, no tenemos que "inventarnos" soluciones alternativas o imaginativas para aplicar los protocolos sanitarios. Por contra, es la Consejería de Educación, en colaboración con la Consejería de Sanidad, la responsable de facilitar los medios y aportar las soluciones para que la implantación de dichos protocolos sea lo más efectiva posible. ¿Cuántas aulas tienen más de 20 alumnos en Cantabria, incumpliendo sus propias promesas? ¿En cuántos centros educativos no se puede respetar la distancia de 1,5 metros sin que la Consejera haya hecho absolutamente nada?
Por todos estos motivos ANPE Cantabria, junto al resto de Sindicatos de la Junta de Personal Docente, ha dicho basta y ha convocado acciones de protesta y dos jornadas de huelga para los días 11 y 18 de noviembre. Los docentes de Cantabria estamos hartos de las mentiras, manipulaciones, decisiones arbitrarias y autoritarias... y de la total ausencia de voluntad negociadora y empatía con nuestro trabajo, de esta Consejera de Educación. Por todo ello, solo nos queda decir LOMBÓ DIMISIÓN.